El asombro, la emoción, el recuerdo
y la alegría se deslizaron por las manos de cientos de visitantes que se
acercaron al puesto de hilado para experimentar aquello que hacía mamá, la
abuela o los tíos durante el pasado fin de semana en la mega fiesta a través de
la gran variedad de stands que se ubicaron en todo el predio en el Pueblo San
José.
Y allí estaban el capacitador de
hilado del Foro Cultural de Coronel Suárez, las hilanderas de Santa María y la
gente de la Biblioteca Juan Carlos Graff del Club El Progreso, todos
comprometidos, junto al COPRODESU,
on la propuesta del Programa
Productivo de Hilado Artesanal y Arte Textil que desarrollaron durante este
año.
Pudieron observar todo el proceso
de transformación: el vellón (de un productor de la región), el escardado, lana
hilada sucia, limpia, lana teñida con elementos naturales de la zona, las
madejas, prendas tejidas con diferentes grosores de hilado.
Fue, sin dudas, un atractivo
diferente y motivador.