Si
estás mal busca un nuevo comienzo en otro lado. Seguir con lo conocido, es
vivir como un pájaro enjaulado. Tiene su comida segura y está protegido contra
la intemperie. Pero no es feliz. En cambio, el pájaro salvaje tiene que
enfrentarse a los depredadores. Puede pasar hambre. Puede mojarlo la lluvia.
Pero puede extender sus alas y volar a todo lo ancho del mundo. Con su vida
arriesgada, de incertidumbre, es más feliz que el pájaro enjaulado.
Así
que recuerda: el costo del cambio nos aferra emocionalmente a cosas que ya no
tienen sentido el día de hoy. Paga el costo del cambio. Que tu vida sea una
hermosa aventura. Abre las alas como el pájaro salvaje y explora lo ancho del
mundo. Vas a ser más feliz. Te lo garantizo.
Habiendo
leído esto y reflexionado profundamente: ¿Te atreves a cambiar?